Olga Jiménez Urquía
¡Lo hemos probado! Damos fé del restaurante asiático de moda en Chamartín. Está ubicado en la calle Félix Boix y es un bonito local reformado hace apenas un año. Su nombre y su logotipo ya refieren algo distinto, una propuesta gastronómica renovada. Simbolizan la unión y fusión de la cocina asiática con toques occidentales.
Eva Chen es la tercera generación de una familia de hosteleros dedicados a la cocina oriental en nuestro país. Su inquietud y pasión por la cocina dan como resultado un nuevo concepto de restaurante asiático que se sale del prototipo de restaurantes que tenía su familia, la cadena Tao. Se reinventa con La Pagoda, introduciendo detalles más occidentales. Es cocina fusión con toques castizos y presentan platos de origen japonés, koreano, tailandés, vietnamita y camboyano…
El local es muy chulo y diferente a lo que puedes esperar de un restaurante oriental. Dispone de dos alturas y una terraza exterior para disfrutar de las noches madrileñas.
En la planta baja hay varias mesas junto a un gran ventanal a la calle y una pequeña barra.
Subiendo las escaleras encontramos varios ambientes con mesas de distintos tamaños.
Presentan una decoración moderna de aire tropical en colores cálidos, ornamentado con lámparas de paja, paredes forradas en bambú, papel pintado en las columnas, sillas de colores… Domina el color blanco en las paredes y suelos, que combinado con el turquesa del estampado de las hojas orientales y los azulejos, crea un ambiente muy acogedor.
Su carta se divide en “Para compartir”, “Sushi”, “Ensaladas”, “Para deleitarse”, “Para acompañar” y “Postres”. Pueden ser la mayoría platos para compartir.
La carta de vinos es reducida pero variada, con referencias internacionales, cervezas asiáticas y combinados para disfrutar como remate a una deliciosa cena.
Cuidan mucho el producto y la presentación. El servicio es muy bueno y fueron muy atentos explicándonos cada plato que probamos, sus ingredientes y la mejor forma de degustarlo.
Comenzamos con el Harumaki de langostinos. Rollitos de langostino en tempura, dorados en su punto, con setas shiitake y bambú, acompañados de salsa agridulce picante.
Entre sus recomendaciones resaltan los falsos huevos rotos: sobre calabaza cocida en tempura, con tacos de atún rojo y alga nori. Se revuelve todo para resaltar el gusto del atún rojo y el toque salado del alga. Están exquisitos y consiguen simular el popular plato madrileño de patatas y jamón con todo el sabor de estos ingredientes de mar.
Degustamos también el Crab Rangoon, de textura crujiente y aderezado con salsa agridulce. Son raviolis crocante rellenos de crema de queso y tiras de cangrejo.
El Salmón Dragon Roll con mayonesa japonesa y tomiko. Tiene tempura de langostino con aguacate, queso crema y salmón flambeado.
Otras recomendaciones son los Nigiri de huevo de codorniz con trufa y el Mar y montaña roll relleno de langostino crujiente envuelto con un carpaccio de ternera flambeada y escamas de bonito.
El plato estrella son los Tacos coreanos de solomillo a la plancha con verduras y salsa kimchi. Lo sirven caliente y resalta el sazonado de la carne y el picor del kimchi que, junto al toque de la lima, logran una explosión de sabor.
De postre degustamos un flan de queso, mango y kiwi. El broche fresco a una deliciosa cena, servido en un tarro muy original.
No dejéis de ir a La Pagoda, ¡os sorprenderá! Y disponen también de opción take away para disfrutar dónde y cuándo quieras de su carta.
Félix Boix, 7
91 345 40 47
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