Por Patricia Peyró @madridmuychic
Desde hace varios años, el barrio de las letras es un reclamo fundamental en el panorama gastro madrileño, y por eso estamos muy atentos a todas las novedades de por allí. Una de las más recientes es la reforma llevada a cabo por el restaurante La Vaca Verónica, un clásico de la zona, que ahora evoluciona con un impresionante cambio de imagen, e introduciendo platos innovadores dentro de su carta.
Para empezar, despide a “la vaca” para siempre, y pasa a llamarse LAVERÓNICA (todo junto). Su idea ha sido la de mantener la esencia de siempre, pero dando un paso más en todo, especialmente en diseño e imagen. Nos lo cuenta Mariana Gyalui, la gerente del que podemos considerar ahora un restaurante nuevo. “El diseño ha cobrado gran importancia y se han encargado piezas realizadas expresamente para nosotros con el estudio de interiorismo NEUTRA y bajo la dirección de Jesús Regueira.”
La carta mantiene sus platos estrella de siempre, como el corte de carne de vacuno y la “grande” pasta de carabineros, pero introduce algunas novedades muy apetecibles. Nos encantó su selección de ensaladas, y quedamos encantados con el escabeche casero de berenjena. Un must total!
En LAVERÓNICA mantienen los mismos servicios que antes, y siguen ofreciendo un menú del mediodía en su versión corta o larga, pero también amplían el horario adaptándose a la tendencia del servicio non-stop y personalizado según el momento del día.
La idea es ser no sólo un restaurante, sino un lugar de encuentro de amigos donde comer y beber, pero también hablar y, como dice Mariana, que de esto sabe mucho, “un espacio para disfrutar del contacto humano” Un concepto muy propio del slow food que tanto se lleva ahora y que nos encanta.
LAVERÓNICA
C/Moratín, 38
+34 91 4 297 827 |
(Fotos propias y de Laverónica)
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